En una tarde perfecta para jugar al fútbol, los roles estaban claros al inicio del partido: Las Chicas de Hierro llegaban como favoritas y con la intención de olvidar su derrota en Frankfurt. Y lo demostraron desde el principio: un tiro libre de Athanasia Moraitou encontró a Dina Orschmann en el área, cuyo potente cabezazo fue desviado al travesaño por la portera del Ingolstadt, Anna-Lena Daum.

En el minuto 19, la número 11 del Union tuvo más suerte en la definición: tras ganar el balón en el campo del equipo rival, Naika Reissner centró con precisión al área pequeña, donde Orschmann de nuevo se despegó con habilidad de su rival y empujó el balón sobre la línea con un disparo seco para marcar el primer tanto. Apenas unos segundos después, las rojiblancas tuvieron la siguiente oportunidad cuando Reissner volvió a iniciar el juego y esta vez cedió a Antonia Halverkamps al borde del área, cuyo disparo desde los 16 metros se marchó medio metro rozando el poste (21').

De esta manera, el once de Poese controlaba el partido, aunque sin peligro para marcar el segundo. Al mismo tiempo, la defensa de Köpenick no dejó huecos y cortó de raíz los intentos de contraataque del Ingolstadt. Hasta el descanso no hubo más jugadas destacables en el área, con una merecida ventaja de 1-0.

Tras una breve fase de tanteo al inicio de la segunda mitad, el partido ganó ritmo notablemente a partir del minuto 54. Sin embargo, la primera llegada clara tras el descanso la tuvieron las visitantes de Baviera: Pija Reininger corrió sola hacia Cara Bösl, que se encontraba lejos de su portería, e intentó un tiro elevado, pero el balón se fue por encima (54'). Las Chicas de Hierro sí que fueron más eficaces y aprovecharon poco después su primer disparo a puerta en la segunda mitad: Dina Orschmann avanzó con fuerza por la izquierda y envió el balón plano al punto de penalti, donde Antonia Halverkamps, sin concesiones, disparó el balón a la red al primer toque (58').

Tan solo cuatro minutos más tarde, la propia Orschmann pudo celebrar por segunda vez: Naika Reissner dejó a su oponente parada a la izquierda y pasó el balón hacia adentro, donde Orschmann literalmente voló y empujó el balón sobre la línea con un gran remate (62). El Union quería más y completó la goleada unos segundos más tarde: después de un duelo ganado por Tomke Schneider, Lisa Heiseler dejó a su oponente atrás al borde del área y luego remató fríamente al ángulo cercano (64).

Las Unionerinnen no bajaron el ritmo y un tiro libre de Halverkamps desde 23 metros estuvo cerca de convertirse en el quinto. Además de la mejora significativa del rendimiento en la segunda mitad, la grada tuvo otro motivo para la alegría: 6.676 aficionados vieron el partido en el estadio, superando el récord de liga anterior del partido contra el FC Bayern Munich II, cuando estuvieron presentes 6.181 espectadores. Sobre el terreno de juego, los equipos se lo tomaron con más calma en los minutos finales, por lo que no se crearon más oportunidades de gol hasta el pitido final.

Con el triunfo por 4-0, las Chicas de Hierro, que todavía ocupan el segundo puesto de la tabla, pudieron ampliar su ventaja sobre el cuarto puesto de la 2. Bundesliga a nueve puntos.

"Para ser sinceras, nos costó un poco entrar en el partido hoy. Aún tenemos que mejorar. En la segunda mitad, noté que fuimos mucho más estables, sobre todo en el pase. Así que estamos satisfechas, pero sin duda hay cosas de las que debemos aprender, teniendo en cuenta nuestros últimos partidos", dijo la goleadora Antonia Halverkamps, resumiendo la victoria.

Marie Becker explicó: “Hoy estuvimos fuertes de cara al gol y aprovechamos nuestras ocasiones. Sobre todo en la segunda parte, cuando aumentamos el ritmo. En resumen, fue una victoria muy importante y queremos mantener este impulso para el próximo partido”.

"En el descanso, hablamos de la necesidad de estar más alerta y presentes en los duelos. Lo implementamos bien después del descanso y llegamos mucho mejor a los balones. En general, fue una actuación muy completa", dijo la entrenadora Ailien Poese.