El mejor clima futbolístico inglés ofreció el marco perfecto para un partido combativo de la reciente temporada de La Bundesliga. Y al igual que en el inicio de su partido en casa, los Eisernen no dieron a los visitantes de Sinsheim ninguna oportunidad de asentarse. Apenas el árbitro dio inicio al partido, los Unioner se lanzaron al ataque. Además de algunos pinchazos, principalmente Oliver Burke, en su primera titularidad en La Bundesliga, hizo dos grandes exclamaciones: En el minuto 12, su cabezazo pasó cerca de la portería de Oliver Baumann, justo en el borde del área. Siete giros del reloj más tarde, Baumann intentó apoyar a su compañero Bernardo y salió de la portería. Burke dejó a ambos atrás, pero tuvo que realizar su disparo desde una posición no óptima, y así Bernardo logró despejar la pelota en el último momento frente a la portería vacía.

La TSG se caracterizó sobre todo por su compostura. Agradecieron esto por un desenlace aún abierto del partido. Pero también en la ofensiva se mostraron activos e intentaron, sobre todo con balones largos y un rápido juego de transición, romper la defensa berlinesa. Pero los Unioner no se dejaron intimidar en los duelos y se mantuvieron firmes, con pasión, disposición para correr y la dosis necesaria de voluntad.

Pocos minutos antes del pitido del descanso, Bazoumana Touré se abrió camino por el flanco izquierdo y cayó al suelo tras un ligero contacto con Leopold Querfeld. El árbitro decidió por penalti; Andrej Kramarić no dejó pasar la oportunidad y anotó con seguridad para dar ventaja a los visitantes. Antes del cambio de lado, llegó el siguiente golpe para los Eisernen: Con el último ataque antes del descanso, el ex-coloniense Tim Lemperle centró al área, donde el ex-Unioner Fisnik Asllani, de cabeza, puso el 0-2. La plantilla de Steffen Baumgart se fue al vestuario con un déficit de dos goles.

Si la primera parte terminó con intensidad, la segunda no iba a quedarse atrás. Nada más reanudarse el juego, los locales quisieron olvidar los últimos minutos antes del descanso y se lanzaron a presionar al Hoffenheim.

Ilyas Ansah fue el primero en avisar: con su insistencia puso en aprietos a Baumann, que llegó al balón pero no logró controlarlo. El delantero berlinés estuvo más rápido y, desde corta distancia, envió el esférico a la red para firmar el 1-2 en el minuto 49. La reacción, sin embargo, duró poco. Apenas tres minutos después, Fisnik Asllani culminó un contraataque visitante con frialdad y devolvió la ventaja de dos goles (1-3).

Lejos de rendirse, el Union siguió buscando. Y volvió a encontrar premio en una acción a balón parado, el punto débil del Hoffenheim durante toda la tarde. En el 71, Tom Rothe aprovechó un rechace en el área para mandar el balón con contundencia al fondo de la portería, poniendo el 2-3 y devolviendo la emoción al encuentro.

Con los cambios en ambos banquillos, el partido ganó frescura pero también se abrió más. En una de esas acciones, Alexander Prass centró desde la izquierda y Lemperle fue derribado por Rothe en el área. Penalti y expulsión. El propio Lemperle asumió la responsabilidad y marcó el 2-4 definitivo en el minuto 83, sellando la victoria visitante.

"Tenemos que evitar encajar goles con más solidez como equipo, en eso debemos trabajar con mayor intensidad. Claro que estoy contento por mi gol, pero me habría importado mucho más conseguir un punto o incluso los tres. Lo positivo es que generamos más ocasiones y sobre eso podemos construir. Al final atacamos como equipo y defendemos como equipo, pero hoy, como equipo, recibimos demasiados goles para poder ganar", resumió Ilyas Ansah tras el partido.

"Hoy, con los dos penaltis y los demás tantos encajados, cometimos demasiados errores en nuestro juego. Los fallos forman parte del fútbol, pero recibir cuatro goles en un partido en casa es, simplemente, excesivo. En ataque generamos buenas situaciones y fuimos más valientes, y eso es precisamente lo que queremos llevar a la próxima semana de entrenamientos", resumió el capitán Christopher Trimmel ante los micrófonos.

“Está claro que hoy hubo aspectos individuales que debemos mejorar. Aun así, estoy satisfecho con el rendimiento de mi equipo. El doble golpe antes del descanso fue un momento duro de asimilar, pero después de cada contratiempo hemos sabido levantarnos, y eso es exactamente lo que queremos ver. Ahora toca dar un paso más, tanto en ataque como en defensa, para poder llevar este tipo de partidos a nuestro favor", reflexionó el técnico Steffen Baumgart tras el encuentro.